La justificación del curso.
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Si preguntáramos a un experto con experiencia en visualización arquitectónica 3D no dudaría al responder: "la imagen 3D extraída del software debe tener SIEMPRE una postproducción". Cuanto más importante para ellos que con esa imagen generalmente deben seducir para vender. Y sin embargo hay una razón de peso para que en imágenes 3D y su uso patrimonial la postproducción sea mucho más importante.
Los estudios de público sobre exposición patrimonial en dispositivos que utilizan imágenes o audiovisuales virtuales 3D, bien sea mediante cuestionario cerrado o mediante observación directa, son bastante unánimes: el público valora muy positivamente una mayor inmersión en la escena que ve, y hace referencia explícita al fotorrealismo y a la ambientación. Y esto es importante porque la atención, junto con la motivación o la memoria, forman parte intrínseca del aprendizaje, uno de los objetivos de la divulgación patrimonial.
En ocasiones podremos utilizar la postproducción para crear o recrear una estética determinada de nuestras imágenes, pero otras su utilidad puede estar directamente relacionada precisamente con una mayor aproximación al fotorrealismo de la que conseguimos con la imagen primaria.
Otro elemento de gran valor: la inversión de tiempo y trabajo es mucho menor y el resultado es mejor. En muchas ocasiones invertimos largas horas de trabajo para recrear una iluminación concreta o vegetación que servirá para una imagen fija en el software 3D. Con una postproducción adecuada se puede minimizar esa inversión de tiempo y trabajo, que de una forma sencilla, más versátil, y además reversible, se puede hacer mediante Photoshop.
Es compatible y complementario con Blender y 3D Studio Max.
Hay quien diría no sólo compatible, sino necesario para tener una mayor autonomía en el acabado de la imagen. Tanto los renderizadores de Blender como los de 3D Studio Max son capaces de realizar, junto al render RGB, diversos pases simultáneos al render final con diferentes aspectos de la imagen, como las sombras, la profundidad de campo (que tanto tiempo de render consume al hacerlo con la cámara), la iluminación o la reflexión. Todos ellos, por separado, nos permiten variar cada uno de estos factores sobre la imagen primaria en Photoshop, de una manera controlada y además reversible mediante capas, lo que nos da una libertad de edición gigante en un tiempo mucho menor de trabajo. Complementa tu trabajo en Blender o 3DS con un acabado más profesional a través de la postproducción en Photoshop.
La presentación de reproducciones fotogramétricas.
Dota a tus presentaciones fotogramétricas de un aspecto más fotorrealista o interesante mediante la postproducción. Introducirás sombras, luces difusas o un fondo más profesional a través de las herramientas de Photoshop, del mismo modo exactamente que con cualquier fotograma 3D.
Y mucho más... La corrección de color y la integración de imágenes.
Aprenderemos de una forma fácil, intuitiva y rápida, a combinar ajustes del color como el tono y la saturación, el equilibrio de color, las curvas o los niveles. Integra superficies para los suelos que no hayan quedado a tu gusto en la imagen original y dota a tu imagen de una vegetación atractiva, tan importante para la ambientación exterior en el uso patrimonial del 3D. Busca la estética más atractiva o la ambientación evocadora ideal para tu proyecto de divulgación.
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